Bueno aquí va algo de lo que ocurrió aquel día, 12 de junio de 2004, primer programa de Badía en Concierto. Era el regreso de Juan a la TV con un programa musical así que estuvimos casi dos meses preparándolo.
El formato que Juan había pensado era el de un programa de dos horas con una figura central, 3 figuras secundarias (una de ellas de folklore y otra de tango) y una figura o grupo en ascenso. Todos compartían un living circular, tenían un momento sorpresa y luego el escenario.
Para el primer programa, Juan quería arrancar con todo así que después de descartar a Fito, apuntamos a Charly. Con el Ok de Fernando Seresesky, Monitor y el propio García, decidimos armar un programa con figuras con las que Charly tuviera cierta afinidad.
El resto de las figuras eran David Lebón (hubo que traerlo en remís desde Mendoza por su fobia a los aviones), el Negro Rubén Juárez, Liliana Herrero y Leticia Bredice. En la previa Charly puso como condición una limusín y una guitarra para romper.
No les cuento lo que nos costó convencer a Cacho de Daiam para que nos regalara una viola pedorra para destruir. La limusín a cargo de Edgar del Grupo Volcán llegó puntual a la cochera de Alcorta y fue mi misión acompañar al huésped hasta su camarín.
Según la rutina que armamos Charly debía participar de la apertura con el resto de los invitados y sería el primero en inaugurar el escenario. Si bien estaba toda su banda con los chilenos más los hermanos Di Salvo, Charly nos pidió para empezar el piano de cola.
El programa arrancaba a las 19. Cinco minutos antes, había más de 400 personas en las gradas, periodistas y directivos del canal presentes en el estudio. Estaban también el conductor y todos los invitados... menos uno. García se había atrincherado en el camarín.
Una productora del equipo montaba guardia en la puerta del camarín y después de varias requisitorias, finalmente García abrió la puerta, pero no para salir sino para dar una orden: -¡Sábanas, necesito sábanas blancas!
Desesperado, otro compañero salió corriendo rumbo a Vestuario, pero a esa hora del sábado el depósito estaba cerrado y no había nadie para abrirlo ¿Dónde podíamos sacar una sábana blanca a esa hora en el canal?
18:59 el logo de canal 7 da paso a la cortina del programa: "Música que llena tu vida..." El estudio 1 explota de gente que aplaude porque comienza el show. Mientras tanto, una maquilladora trae lo que podría ser una solución: una manta blanca de peluquería.
Antes de que la productora abriera la puerta con la manta salvadora, Charly escapa del camarín, entra al estudio y se suma a la hilera de invitados que ya desfila junto a Juan frente a las cámaras. Nadie lo notó, pero Charly entró al estudio con el programa al aire.
Durante el primer bloque, compartió el living con el resto de los invitados que no habían podido siquiera saludarlo. Hizo un par de chistes y, llegado el momento, Juan lo invita a inaugurar el escenario del concierto.
Lo acompaña hasta el piano de cola exigido, Charly lo examina. Dice: -Muy lindo, eh. Toca una tecla, pin. -Ya está inaugurado! Badía entiende el chiste, juega el juego de García y pide el primer corte del programa.
Durante la tanda, Charly se encierra en el camarín donde lo esperaba la manta de peluquería. Permanecerá encerrado allí por el resto del programa sin compartir nada con el resto de los invitados. Según nuestra rutina, Charly debía cerrar tocando 4 temas en el último bloque.
El programa se desarrolló sin sobresaltos hasta llegar al último bloque. La banda de García estaba completa sobre el escenario, habían probado sonido solos una hora antes del programa. Venimos al aire, Juan se acomoda en el centro del set, agradece al público y celebra su regreso
García permanece en el camarín. Badía comienza a presentarlo, se quita el saco, hace tiempo, se arrodilla y grita completamente entregado: Charly García! La banda comienza a sonar.
La intro se alarga indefinidamente hasta que una figura blanca y delgada surca desde una de las entradas laterales todo el estudio 1 para ubicarse frente a los teclados. Era Charly Bin Laden que reclama: "Be afraid, be very afraid" y empieza a tocar un teclado que no anda.
Uno de los stage enchufa bien el teclado y Charly enfundado en la manta blanca de peluquería arranca con Dileando con un alma. Seguirá con Desarma y sangra (la que debería haber tocado en el piano) y luego Rock & Roll Yo. Al terminar esta canción ya eran las 21, hora de cerrar.
En un completo dominio de tiempo y espacio, García lo mira a Badía y mediante una seña le pregunta si podía hacer una más. Rendido, Juan le dice que sí, Charly le responde Ok y para sorpresa de todos se mete con Loco no te sobra una moneda.
Es un tema que Serú grabó en un disco de Billy Bond y que solo tocaron en vivo. En los primeros compases, Charly le hizo una seña a David para que se sume ¿Qué guitarra estaba disponible para el Ruso? La guitarra que Daiam nos dio para que Charly rompiera.
El Ruso se subió y la descosió como si hubieran ensayado. Charly tiró sus teclados al finalizar pero no rompió nada. Terminaron todos juntos cantando tangos en el camarín de Juan al compás del bandoneón blanco de Juárez. Hace poco me crucé a la Bredice y recordaba todo tal cual.
*Algunas apostillas porque la memoria puede fallar: En el set de cuerdas ya no estaban los Di Salvo, sino otros sesionistas. La viola que le dan a Lebon puede que no sea la que le devolvimos impoluta a Daiam. Recuerdo un modelo más pedorro.
**No eran épocas de smartphones, pero alguien se metió con una camarita digital y registró algo de todo aquello. Al comienzo se ve a Charly saliendo del camarín para el último bloque. A los 3:02 me cruzo yo que volvía de pagar la limusín
***Charly no hubiera estado allí sin la colaboración de @marchisergio