Jeff Dean fue un verdadero visionario al empezar a trabajar en chips de IA desde muy temprano. Los fundadores de Google fueron increíbles; simplemente decidieron hacerlo. Que una IA tradujera este pasaje profundizó mi admiración por Jeff. Google decidió fabricar chips cuando la IA todavía sólo "distinguia entre gatos y perros". Sergey Brin contó una historia bastante interesante sobre Jeff Dean. ¿Sabes de dónde viene el TPU (el chip de inteligencia artificial de Google)? Jeff una vez hizo los cálculos: si los usuarios hablan con Google durante tres minutos todos los días, Google tendría que duplicar sus centros de datos de CPU. En lugar de seguir comprando CPU, decidió construir su propio chip de IA. ¿Qué es lo más genial de esto? El momento. En aquel entonces, las redes neuronales sólo podían “distinguir entre gatos y perros”, y la IA no era tan popular como lo es hoy. Pero cuando Larry y Sergey vieron esta tecnología, su reacción fue: "Interesante, hagamos un chip dedicado a ello". Esta es la máxima confianza en los mejores talentos. Esta sentencia ha convertido a Google en la única empresa de inteligencia artificial que posee simultáneamente modelos de primer nivel, chips de primer nivel y centros de datos de primer nivel. El liderazgo tecnológico no es casual. A menudo surge de tomar decisiones audaces cuando otros aún no ven el panorama general.
Cargando el detalle del hilo
Obteniendo los tweets originales de X para ofrecer una lectura limpia.
Esto suele tardar solo unos segundos.