Hoy fue la primera vez que viajé en un coche sin conductor, llevando a mi hijo al colegio en un vehículo de Pony.ai. Aunque había leído mucho sobre coches autónomos y visto muchos vídeos antes, todavía estaba un poco nervioso la primera vez que me senté en uno, dadas las complejas condiciones de las carreteras de Shenzhen (bicicletas eléctricas volando por todas partes y peatones que no prestan atención a los semáforos 😂). Sin embargo, tras verlo maniobrar en algunas intersecciones, me quedé tranquilo. Es realmente muy estable. Si bien a veces puede ser un poco lento y pesado al ceder el paso, la seguridad es la máxima prioridad. Por el contrario, mi hijo estuvo entusiasmado durante todo el proceso. Disfrutaba cada interacción con el sistema de conducción autónoma e incluso quería hablar con él (aunque esta función no está disponible). Sin duda, cada generación tiene su propio nivel de aceptación, y la de mi hijo ante las novedades es claramente mayor que la mía. Tengo muchas ganas de que se generalice el uso de coches autónomos porque no quiero sacarme el carné de conducir 😂
