Acabo de leer un artículo de Pan Luan donde predice que la próxima generación de medios empresariales clave estará compuesta por unos pocos videopodcasters de renombre. Antes, las grandes empresas contrataban a 36kr y Toutiao para el lanzamiento de sus productos. En el futuro, podrían contratar a personas como Luo Yonghao para crear episodios cortos de videopodcast, que luego se distribuirán mediante clips de vídeo breves. Este enfoque es menos costoso y logra un mayor alcance. Esto es bastante común en Estados Unidos. No hay intermediarios que se lleven una comisión. El requisito es que los dueños de las empresas promocionen los productos personalmente, en lugar de depender de comunicados de prensa. Esta comunicación más directa es, de hecho, más eficiente. Pero, ¿se aplica esto en el país? Todavía no lo sabemos. Su artículo también mencionaba que ya nadie lee artículos y que la credibilidad del contenido escrito por los líderes de opinión clave está disminuyendo. Los métodos eficaces de comunicación corporativa son cada vez más escasos. En definitiva, puede que descubras que la manera más eficiente es dar un paso al frente y hablar con sinceridad. Los canales antiguos han desaparecido y se están estableciendo nuevos canales. ¿Por qué tiene que ser un videopodcast? ¿Cuál es la diferencia entre un videopodcast y un podcast? La principal diferencia reside en su valor comercial. Al fin y al cabo, ver tiene más valor que escuchar. Sin embargo, muchos argumentos aparentemente razonables pueden no ser ciertos en realidad. Ayer escuché un famoso podcast de tecnología sobre su experimento. Persistieron en la creación de videopodcasts durante docenas de episodios, pero descubrieron que el retorno de la inversión era totalmente insatisfactorio, así que lo abandonaron.
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