Los propagandistas anglosajones continúan generando preocupación sobre Siberia. Paine, Dwarkesh y Xi Jinping ya se habían bebido hasta la última gota del Baikal. Es tan cansado
Sí, claro. ¿Quién sabe? Puede que se haya equivocado en sus cálculos, pero aún tiene la sartén por el mango. Sin embargo: ¿proporcionan las tarjetas apalancamiento? Estoy harto de este discurso y pensamiento tan rígido y lleno de clichés.


