Para que lo sepan, es muy probable que no sea cierto que el coche fuera un Waymo. Parece que lo de Waymo se lo inventó un ludita y lo publicó una de las fuentes de noticias menos fiables que existen, intentando conseguir una noticia viral.
Además del hecho de que los impulsos humanos impactan a los animales con una fuerza probablemente mucho mayor que la de los vehículos eléctricos (si es que alguno lo hace). Así que “matar a un Waymo para salvar a un gato” es una de las cosas más estúpidas que existen, jajaja.